Una presión insoportable en mi espalda y yo me elevo. Mi
cuerpo ya no está conectado al suelo, flota, vuela en un espacio irreconocible.
No puedo moverme, o no lo intento, la presión no me lo permite.
El viento se siente fuerte e intenso, en mi piel y en mis
oídos. Intento gritar, mis músculos se preparan para hacerlo pero no lo logro,
mi boca parece sellada.
Me sigo elevando y nadie lo nota, tampoco mis sábanas. Y el
viento cobra fuerza y me hace volar, como si no tuviera peso, como una pluma.
¿Estaré muriendo? ¿Alguien me quiere llevar?
Tengo miedo, el mismo miedo que se tiene frente a las
sensaciones desconocidas.
¿Dónde estoy? ¿Dónde estaba antes de que esto pasara?
Estoy inmóvil, me estoy muriendo.
Despierto y caigo donde siempre estuve, puedo mover los
dedos de mis pies.
No hay comentarios:
Publicar un comentario